13 enero 2012

Nuestra mini novela (1ºC)

Como se ha comentado en clase, y a propóstito del contenido del temario (La narración), vamos a hacer entre todos una novela a la que iremos dando cada uno un pequeño toque personal. Yo os iniciaré el relato y luego por turnos la iréis completando. Ya sabéis que tenemos unas directrices que seguir para que la historia tenga un formato adecuado. Así:
  • Narrador: será en primera o tercera persona dependiendo del momento de la narración en el que nos encontremos.
  • Acción: La iremos desarrollando a medida que se va haciendo la historia.
  • Espacio: El colegio y Castilla y León.
  • Tiempo: Curso 2011-2012 (de septiembre a junio)
  • Personajes:
    • Profesor: Pepa
    • Director: Josemi
    • Alumnos: María, Elena, Clara, Gabriela, Lucía, Nuria, Santiago, Ángel, Lucas, Alejandro, Raúl, Jaime.




-    Seguro que hay algo nuevo sobre lo que nos tendremos que quejar y que no nos dejará dormir durante mucho tiempo, dijo Lucía con voz soñolienta por el madrugón de inicio de curso y a lo que ya se había desacostumbrado sin mucho esfuerzo.
-    ¿Una excursión, ganamos un premio a nivel internacional, secuestros, robos, desaparece el colegio por un ataque alienígena…? Deja de divagar y vamos para clase, replicó Lucas con ganas de volver a ver a los amigos a los que no había visto en todo el verano.
Quince de septiembre de dos mil once. Ocho y media de la mañana y los pasillos del colegio llenos de gritos, mochilas nuevas y sobre todo los abrazos de los compañeros a los que no habíamos visto durante todo el fantástico verano. Unos más contentos que otros veníamos a pasar una nueva aventura. Un nuevo curso que realmente nosotros empezábamos entusiasmados, sin saber el sinfín de historias que íbamos a pasar juntos (aunque con sorpresas), historias que nos iban a marcar para el resto de nuestras vidas. En alguna ocasión pensamos que Lucía era bruja porque ya había previsto que habría algo que no nos dejaría dormir durante mucho tiempo, pero gran parte del colegio tenía muchas sospechas sobre ella…
Siguiendo la tradición, el día antes de empezar el curso habíamos quedado todos los amigos de nuestro grupo para contarnos las batallitas veraniegas (unas reales y otras no tanto…) y para trazar el plan del nuevo curso… Como ya nos habíamos visto previamente ya no era tanto el ímpetu con el que nos abrazábamos esa mañana de verano. Pero al empezar las clases llegó el primer susto del curso. Nosotros, que siempre habíamos estado juntos sufrimos la gran ruptura: María, Elena, Clara, Santiago, Ángel y Lucas en 1ºB y Gabriela, Lucía, Nuria, Alejandro, Raúl y Jaime en 1ºC.  Parecía que se nos iba a acabar el mundo pero pronto vimos el punto positivo de la separación: tendríamos controlada gran parte de nuestro curso… Y esto fue algo que a lo largo de los meses nos sirvió de mucho.
Después de la terrible noticia que nos había dado José Miguel (que pronto pasaría a ser llamado Josemi), el nuevo director que había llegado a nuestro colegio, fuimos a clase. Primera hora del primer día de curso y también estrenando profesora de Lengua, Pepa. Hoy para nosotros era todo nuevo…
La nueva clase de Lengua tenía muy buena pinta, con una profesora dinámica y sobre todo nueva de la que tendríamos muchas cosas que descubrir aunque no nos iba a poner las cosas fáciles. Empezó, como es natural, intentando conocernos a todos, tarea que no le pusimos nada fácil ya que en este tipo de artimañas éramos todos unos grandes maestros. Después de bromear con la nueva profesora nos pusimos a la tarea y empezamos a estudiar. Como se nos planteaban actividades distintas sabíamos que teníamos que recompensar a esta profesora de alguna manera y qué mejor manera que aportar nuevas ideas para la clase que seguro que las aceptaba. La primera actividad sorprendente fue que nos planteó ser escritores por un momento dado que entre todos íbamos a crear nuestra propia novela, pero fue a raíz de aquí dónde empezaron los extraños sucesos que terminarían como terminaron a final de curso.
Mientras tanto, en 1ºB estábamos empezando a asustarnos con las Matemáticas porque desde siempre se había oído que había que tener mucho cuidado con esas clases porque era una de esas asignaturas imposibles, así que ni siquiera nos planteamos el tener un día de presentación, manos a la obra con ello.
Segunda y tercera horas terminadas, y por fin la ansiada hora del recreo. Nos juntamos todo el grupito y nos contamos qué había pasado en estas dos horas que habíamos estado separados.
-    No es justo que nos separen a estas alturas, reprochaba Clara con un gran enfado. En esta nueva clase no estamos todos y así nos perderemos grandes momentos. Tenemos que hablar con Josemi y plantear un cambio.
Dado que Clara tenía grandes dotes para eso de influir en la gente todo el grupo decidió encaminarse hacia el despacho de la directora para plantear sus problemas.





38 comentarios:

  1. Cuando llegamos al despacho de Josemi, nos atendió la secretaria Laura que nos comentó que no nos podía atender porque estaba reunido con el resto de los profesores de 1º de la ESO. A continuación saltó Clara que volvería ella a las 14.30 para hablar con él y con la propuesta decidida de solucionarlo y comentárselo. Todavía nos quedaba un par de minutos para hablar del verano, Lucia nos contó que su verano había sido súper emocionante y que como siempre había estado en el pueblo con su prima
    Ruth y Ainara bailando y riendo. Ángel nos relató que su verano había sido el más aburrido del mundo con diferencia, pues había pasado todo el día en casa solo porque sus padres tenían que trabajar desde las ocho de la mañana hasta las tres del mediodía. Nuria nos dijo que su verano había sido de muchos altibajos: se murió su hermana después de un bonito crucero por el Mediterráneo. Jaime nos relató que su verano había sido muy feliz porque nació su hermano Álvaro y las fiestas de su querido pueblo “Ruinas del Monte” con su iglesia, unas de las más altas de la comarca. Gabriela nos narró que había viajado a Estados Unidos especialmente en Oklahoma y que se había comprado… Piiiiiiiiiiiii tocó la campana de que se acababa el recreo.
    Llegó 4ª hora en 1º B y estaban todos temblando del miedo ante la nueva profesora de Matemáticas que decían que era muy mala pero no solo los de 2º de la ESO. Se presento Aurora: “Hola, soy vuestra profesora de Matemáticas. Me llamo Aurora”. Nos preguntó los nombres y se dispuso a dar clase. En 1º C las cosas empezaron mejor. Pepa, la profesora de lengua nos preguntó que qué tal el verano y todos como loritos respondimos que muy bien, los nombres y la asignatura que más nos gustaba… Ninguno dijo que Lengua excepto Lucía que dijo que era Lengua la que más le gustaba haciendo, yo creo, un poco la pelota. Tocó el timbre y todos gritamos: “Bien una hora menos para acabar este día de colegio”. En 5ª hora nos juntaron a todos para que viésemos un power point de los objetivos de este curso, como hacían en todos las cursos pasados. El grupo de siempre nos sentamos juntos y como de costumbre el power point fue un auténtico aburrimiento. En la sexta hora queríamos salir los 3 primeros inmediatamente.
    Piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii tocó y todos salimos rápidamente hacia la puerta de salida excepto Clara que se quedó a hablar con Josemi que ya sabía lo que le pasaba, porque su secretaria se lo había contado. Clara le propuso que separase las clases por Francés y refuerzo de Matemáticas y Lengua. Josemi se lo estuvo pensando un buen rato hasta que tomó la decisión de no separarnos. El grupito nos juntamos y nos fuimos a comer juntos a una hamburguesería que había cerca del colegio. Cuando llegamos al local vimos que estaba lleno de personas de nuestro colegio. A continuación vimos al otro grupito de 1º A, que nos había copiado la idea. Al ir a pedir la comida, Clara nos dijo que nos teníamos que sentar al otro lado del local para no verles el pelo.
    Después de comer nos fuimos al parque que estaba en la zona ajardinada de la urbanización. Los chicos cogimos un balón y nos pusimos a jugar al fútbol, y las chicas de pusieron a cotillear como casi siempre hacen ellas.
    A las 5 de la tarde nos vinieron a buscar nuestros padres, pero no nos queríamos irnos porque nos lo estábamos pasando muy bien. Entonces los padres se pusieron de acuerdo para dejarnos una hora más de juegos y ellos decidieron quedarse juntos y tomar algo en el bar del tío de Nuria.
    Al día siguiente llegamos todos diez minutos antes al colegio para seguir hablando de nuestras vacaciones.

    MARCOS QUINTERO

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  2. De repente tocó el timbre y tuvimos que dejar de hablar de nuestro ansioso y querido verano.
    Cuando subimos a clase vimos que Josemi el director, se nos acercaba y nos dijo que iba a pensarse lo de agrupar las clases en los que vayan a francés, los que vayan a conocimiento de matemáticas y lengua. Habiendo hablado con Josemi nos dispusimos a entrar en clase de inglés que a casi todos nos gustaba. Pasada la apasionada y divertida hora de inglés nos dirigimos a hablar atrás de la clase antes de que viniera la profesora de lengua a la que le tocaba la 2 hora. En este rato seguíamos hablando a veces de más cosas graciosas o anecdóticas que nos haya pasado. Estuvimos hablando también de que sensaciones nos causaba tener profesores nuevos y alumnos nuevos. Y por la puerta hizo su entrada en la clase la profesora que nos encantaba a todos con sus gafas y sus graciosos calcetines de colores, acababa de entrar Pepa nuestra profesora de lengua. La clase empezó con revisar los ejercicios que nos habían mandado el día anterior, mediante unos variados tipos de juegos que nos había propuesto. Luego fue preguntando la lección de uno en uno. Sonó el ansiado timbre que indicaba el fin de la 2ª hora y el comienzo de la 3ª hora. Para nuestra sorpresa Josemi, el director, nos dijo que saliéramos un momento que quería hablar con todos nosotros. Dijo que antes de la primera hora, él y los profesores de 1º de la ESO se reunieron para debatir la idea de los grupos de francés, el de conocimiento de lengua y el de matemáticas y nos dijo que habían llegado a un acuerdo, que era que aceptaban nuestra petición pero que a cambio deberíamos organizarnos nosotros de ir en silencio hasta la clase que nos tocara sea de francés o de los dos conocimientos. Cuando acabamos de hablar con Josemi inmediatamente nos pusimos a abrazarnos y a saltar casi sin creérnoslo que íbamos a volver a estar juntos otra vez aunque fuera solo en francés ya que todos éramos de francés pero en estos momentos eso era lo de menos. Todavía con la euforia de que volviéramos a estar juntos ni nos dimos cuenta de que teníamos que irnos al recreo y sin pensarlo un segundo nos fuimos corriendo por patas hasta llegar al patio. Allí nos pusimos a jugar un partidillo de baloncesto contra los de 1º b, a los que ganamos por 15 a 8 puntos.

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  3. Todavía nos quedaban 10 minutos del recreo después de haber jugado el partidillo contra 1b y nos pusimos a hablar de los deberes y actividades extraescolares que teníamos, porque Ángel quería organizar una quedada en el centro comercial que había por el centro de la ciudad. Nuria nos dijo que no podía porque no le dejaba ir su padre y además dijo que a las 4:00 tenia que ir al entrenamiento de pádel al que acudía los martes y jueves de 4:00 a 5:30 de la tarde. Jaime dijo que si podía ir pero que se tenía que ir antes de la 5 porque tenía que ir a clases de esgrima a las que acudía martes y viernes de 4:00 a 5:00 de la tarde. Gabriela nos dijo que si que podía ir. Al final decidimos no ir, porque menos Ángel, Gabriela y Jaime no nos dejaban ir a ninguno. Piiiiiiii ,se acabó el recreo . Nos dirigíamos a la clase para que pudiera comenzar 4º hora a la que hoy pertenecía a la clase de religión. Nos estábamos aburriendo muchísimo hasta el punto de que Jaime se quedara dormido con las explicaciones de la profesora de religión y le tuvo que despertar Gabriela antes de que la profesora se diese cuenta, pero de repente pareció que Dios hubiera nos hubiera mandado un milagro. Sonó la alarma antincendios todos preocupados salimos al patio y nos enteramos de que solo era un simulacro y cuando hubimos acabado de realizar el simulacro nos pusimos en fila y con ayuda de la profesora de religión subimos sin hacer el bobo a nuestra clase. Cuando ya nos hubimos sentado en nuestra silla y estábamos preparados para seguir con el aburrimiento de que nos pusiéramos a estudiar la lección y… piiiiiiiii sonaba el timbre que indicaba que se acababa la clase y el sufrimiento a raíz de lo que habíamos hecho en esta hora de clase. La 5º y 6º hora transcurrieron tranquilas y cuando acabaron nos fuimos a fuera a jugar un poco y luego irnos a nuestras despectivas casas.

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  4. David Pérez Maseda
    Todos estábamos intranquilos esa tarde por que sabíamos que al día siguiente nos dirían la fecha de la inauguración de la capilla del colegio. Sabíamos que para ese acontecimiento nos reuniríamos todos los de primero de E.S.O. para hacer unas convivencias y una pequeña fiesta. A la mañana siguiente todos estábamos impacientes por empezar. Apareció Josemi y cual no seria nuestra sorpresa cuando dijo: “chicos la fiesta empieza ya”. Las clases de primero se dirigieron por grupos al recinto de la capilla. Después de una breve eucaristía que termino a media mañana nos dirigimos a unas pequeñas salas que había dentro de la capilla para organizar la convivencia. A las 15:00, una vez dialogado sobre el tema, subimos al comedor. Nada mas entrar se sonaba la música, todo estaba decorado y lleno de comida. Los alumnos obligaron a los profesores a bailar hasta Josemi se animo y menudo como bailaba. Después de esta graciosa intervención nos pusimos a comer. Todo iba bien hasta que Ángel sin darse cuenta tropezó con la salsa de tomate que había derramado clara en el suelo al servirse el pollo con tomate. El menú salió volando y Ángel cayo al suelo de culo y dio con la bandeja llena de espaguetis, con tomate a María, esta, se enfado muchísimo y tiro la comida a Ángel pero, no acertó y dio a Raúl fue cuando empezó una guerra de comida. Todos empezaron a tirarse comida chicos contra chicas dijo Lucas. Elena lanzo un trozo de comida a Jaime pero calculo mal y dio a la profesora de matemáticas que le cayo en toda la cara y se enfado muchísimo no hacía mas que dar gritos: “parar ya de una vez, sois unos inmaduros. Ahora mismo aviso a Josemi y la fiesta se acaba ya”. Asustados paramos en el momento pensando en el castigo que nos iba a caer. La verdad, es que nos habíamos pasado. La profesora de matemáticas fue a avisar a Josemi para contarle lo que había ocurrido y exigirle que lo solucionara con un castigo severo, Josemi apareció con la cara muy seria y enfadado y nos impuso este castigo. “Vais a recoger todo lo que habéis tirado. Y todo primero de E.S.O. queda castigado sin recreo durante una semana”. Menudo problema ¿por donde empezaríamos a recoger?¿cómo limpiaríamos todo eso? .Nos llevo mas de dos horas limpiar todo lo que habíamos tirado pero al final el comedor quedo impoluto. Después de limpiar dimos por terminadas las convivencias. Estábamos serios y apáticos lo que podría haber sido una gran fiesta se convirtió en un desastre, aunque fue divertido. Al salir del colegio todos llevábamos una nota que nuestros padres tenían que firmar. Por suerte nuestros padres no nos castigaron aunque si que nos regañaron. Para levantar los ánimos nos fuimos a casa de Clara, allí estuvimos tomando un refresco de naranja con unas patatas y cortezas. Charlamos sobre lo que había pasado y nos reímos muchísimo. Después de la charla y la merienda nos fuimos a jugar un parchís, luego todos habíamos llevado los libros para hacer los deberes en casa de Clara. Los hicimos en un momento, aunque eran dobles por lo sucedido en la fiesta. Nuestros padres fueron a buscarnos a casa de Clara y cada uno se fue a su casa. Pasada la semana de castigo acudimos el martes al concurso de esgrima que tenía Jaime, hasta le hicimos una pancarta, fue derrotando a sus adversarios uno a uno, hasta que quedo segundo, y combatió contra el primero, este le venció, pero a Jaime no le importo mucho porque el viernes podría remontar y así lo hizo. Volvió a combatir contra el primero y esta vez le ganó. Cogió su gran trofeo la medalla de honor y el diploma de participación y se subió al podio. Desde ahí hubo unos cañones de confeti que les hicieron estallar, toda la gente le vitoreaba. Sus amigos le dieron la enhorabuena y le acompañaron a su casa. Después todos se fueron a la suya.

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  5. A la mañana siguiente, los chicos llevaron, cada uno, sus firmas de los padres a causa de lo ocurrido la otra vez.
    Tocaba clase de Sociales, luego Inglés, Religión… , las clases se pasaron volando y llegó la última hora: Matemáticas. La profesora tenía que haber venido hacía 5 minutos; se encogieron de hombros y siguieron esperando, esperando, esperando… Hasta que ya estaban a mitad de clase. Todos los delegados de la clase intentaban buscar a la profesora; pero, por más que buscaban no la encontraban. Todos los profesores encargados de cosas como esta estaban en reuniones muy largas e importantes.
    Los delegados entraron y dijeron lo ocurrido. Clara dijo que sería mejor que fuera la clase entera a investigar. Los delegados dijeron que levantasen la mano los que apoyasen a Clara. Santiago levantó la mano, 3 segundos más tarde, Raúl, María y Lucía levantaron las suyas. Unos diez segundos después todos los demás levantaron sus manos casi a la vez. Así que se inició una investigación.
    Caminaron con cuidado por todo el pasillo; pero no encontraron nada. Decidieron investigar otras plantas, y cuando estaban por las escaleras encontraron una nota que decía:
    S.O.S. Calle Arribes del Duero 18 4º C.
    Seguro que esta nota estaba relacionada con el misterio de la profesora de Matemáticas. Todos iban a ir allí, pero se dieron cuenta de que no podían salir de sus clases y no sabían qué hacer. Volvieron a sus pupitres y, cuando todos estaban a punto de sentarse, se oyó un Piiiiii. Sin duda, se trataba del timbre de final de clases. Pepa apareció por la puerta con tal rapidez que derrapó y por poco se estrella contra el suelo. Perdón por la tardanza, pero las reuniones eran importantes; podéis iros.
    Cogimos nuestras mochilas sin pensar en nada más y salimos hacia la calle Arribes del Duero. Antes, hicimos los pocos deberes que nos quedaban. Llegamos al número 18 y, cuando uno de los delegados iba a preguntar cómo entrarían, unas llaves cayeron de una ventana; justamente encima de la cabeza de Santi que se pegó un susto de muerte. Un vecino asomó la cabeza y dijo que si se las podrían lanzar. Clara disimulaba que no poseía la suficiente fuerza y dijeron todos que si podían entrar para dárselas así aprovecharían para ir a la planta 4, puerta C.
    Nelson Tuesta Fernández

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  6. Todos subimos las escaleras a gran velocidad en busca del señor al que se le habían caído las llaves por la ventana al sacudir el mantel de la mesa de la cocina. Se llamaba Jesús y era el famoso escritor de la novela “Tristes sentimientos de un escritor”. Y nos ofreció unos bombones. Al rato nos fuimos en busca de la profesora de matemáticas. Éramos muchos y seguramente íbamos a levantar sospechas así que Clara y Santiago, decidieron continuar solos y que los demás esperaran en la planta baja como si estuvieran esperando a algún vecino del bloque, porque así no llamaríamos la atención, pero María también quería subir así que los tres fuimos corriendo al piso 4C, al llegar nos dimos cuenta, de que la puerta estaba medio abierta, y eso ya nos causó una mala impresión. Estábamos un poco asustados pero de todos modos decidimos entrar. María la empujó despacio y al abrirla descubrieron otro papel en el suelo, en el que ponía “SOS” castañuelas. Empezamos a dudar de que fuera otro lugar o calle ya que aquel nombre no nos resultaba conocido salvo como instrumento musical. Aún así con mucha rapidez bajamos las escaleras hasta la planta baja donde se encontraban los otros compañeros, contando lo sucedido. Decidimos entre todos continuar la búsqueda de las castañuelas. Preguntamos a cinco personas que se encontraban en las proximidades pero nadie sabía de la existencia de esa calle, así que fuimos al bar más cercano donde había un camarero muy simpático que servía en la barra y que llevaba el pelo de punta aunque no le quedaba muy bien y le preguntamos por la calle, pero tampoco sabía nada. Nos comentó que él no era de esa zona y que solo trabajaba ahí los fines de semana por la tarde. Al salir del bar ya no sabíamos a dónde ir así que pensábamos en volver al colegio ya que no teníamos ni idea de a qué cosa se refería la nota de socorro. Estábamos desanimados y tristes pero en ese mismo instante según giramos a la derecha vimos un gran edificio con un rotulo en blanco y azul cielo que decía piscinas públicas “Las Castañuelas”. No nos podíamos creer la suerte que estábamos teniendo, habíamos encontrado un edificio con el nombre que estábamos buscando. Era un edificio que tenía dos plantas y parecía más antiguo que los edificios que se encontraban a su alrededor. Las ventanas estaban muy sucias sobre todo las de arriba. Aún así para su antigüedad parecía un edificio de mucha categoría.
    Todos teníamos ganas de entrar, el problema era cómo .Caminamos por el sendero que nos conducía hasta la entrada principal del gran edificio. En la entrada había una portera morena y con cara de pocos amigos. ¿Cómo íbamos a entrar? ese era el caso, ni idea. Santiago propuso que intentáramos engañarla pero no tenía pintas de ser muy amable así que pensaríamos en otra cosa. El problema era si llegaríamos a tiempo a rescatar a Pepa. Además se hacía la hora de volver a casa: las siete y media. Nuria no quería esperar más así que de la mochila que siempre llevaba con ella sacó un abrigo de hombre de una persona muy alta por el tamaño. Se subió encima de Jaime y se recogió el pelo con un sombrero porque Nuria llevaba el pelo muy largo. Los demás nos quedamos mirando y ellos empezaron a caminar. El problema era guardar el equilibrio y además que no les descubrieran. Jaime empezó a caminar lentamente y se puso delante de la portera y dijo “Hola, ¿ puedo pasar? ” El tema se complicó cuando pidió el nombre. Nuria se quedó seca después de reaccionar exclamó -¡Jesús López! Aboné la cuota el lunes pasado. La mujer hizo una mueca y les dejó pasar. Los demás se quedaron mirándoles con ganas de vivir la aventura. Nuria estaba a punto de atravesar el hall cuando Jaime tropezó y todo se estropeó Nuria y Jaime se levantaron y la portera al verles salió detrás de ellos. Los demás intentaron entrar pero llamaron al guardia de seguridad del edificio y les impidió entrar. Nuria y Jaime mientras tanto intentaban huir para que la portera no les pillara. La portera les decía que pararan pero ellos no tenían intención de parar.

    CONTINÚA...

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  7. En ese momento de un pasillo salió una silueta que les metió en una habitación. La portera no les vio y siguió corriendo. La silueta era una chica joven de más o menos veinte años de edad con una larga melena de color rubio, ojos claros y con una cara muy agradable. La señorita nos dijo que su nombre era Eva. Llevaba un traje de la limpieza y nos preguntó qué hacíamos nosotros allí. Le contamos toda la historia y prometió echarnos una mano. Miramos el enorme reloj que había en la habitación de color oro y eran las ocho y cuarto. Ya llegábamos tarde a casa.
    A gran velocidad fuimos registrando toda las habitaciones que había en el gran edificio pero al terminar todas las habitaciones no encontramos nada. Ella dijo que también había habitaciones en el sótano pero que ya no nos podía ayudar a bajar así que corriendo bajaron a la planta de abajo y para descender al sótano teníamos que pasar por una puerta que ponía “sólo personal autorizado”. Ella se despidió y dijo que para lo que necesitáramos nos ayudaría.
    Nuria abrió la puerta y visualizó unas largas escaleras oscuras y al final de las escaleras se veía una pequeña zona iluminada por una pequeña vela y comenzaron a bajar por las estrechas escaleras. Jaime iba en cabeza y Nuria estaba muy pegada a él muerta de miedo por lo que se pudieran encontrar en aquel lugar. Al llegar abajo solo encontraron una vieja sala de máquinas y un escritorio de madera oscura muy antiguo y sobre él una vela de color claro encendida, una pulsera de color rojo que nos sorprendió de inmediato porque era igual que la que llevaba el último día a clase la profesora de Matemáticas y además había otra nota en un papel envejecido que decía…

    Marina Pérez Gómez

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  8. “Ain “y al finalizar la (n) había una línea de tinta. Nosotros pensamos que no la habrían dejado seguir escribiendo, y se la habían llevado a otro lugar. Pero que significaría “Ain”. No lo sabemos era muy tarde y teníamos que regresar a casa o nos regañarían nuestros padres. Mientras estábamos subiendo las escaleras, a Nuria se la desataron los cordones, y se sentó en un escalón a atárselos. Mientras Nuria se ataba los cordones Jaime se quedó mirando el escalón y dijo: -mirad, ¿qué es eso que brilla? Era un diamante, María lo cogió y se lo guardó. Esperábamos encontrarnos con la portera así que anduvimos con precaución, Jaime se adelantó y vio que la portera no estaba en la entrada, ¿Dónde estaría?, echaron a correr hacia la salida y no les vio nadie, pero se entretuvieron en contarles lo sucedido a los compañeros que no nos habían acompañado y salió una vecina muy mal educada que nos regañó y nos dijo que nos fuéramos de ahí ya. Nos despedimos, y cada uno se fue a su casa. A la mañana siguiente en el colegio, estábamos comentando lo sucedido a noche cuando de pronto entró Josemi con una señora, su aspecto no era malo, parecía simpática. Era morena, de ojos verdes, alta… pero, no nos podíamos creer lo que estábamos viendo, llevaba un colgante de diamantes tenía dos diamantes, pero faltaba uno en el medio de esos dos… Josemi nos la presentó, su nombre era Ainhoa, otra cosa que nos hizo sospechar. Mientras nos estaba dando la clase se quitó el collar y lo guardó en su abrigo, que lo había dejado en la silla. Al finalizar la clase de matemáticas, en el intercambio, todos nos reunimos y hablando, todos coincidimos que era mucha casualidad, el collar, su nombre que empieza por “Ain”… Santiago miró la silla de la profesora y vio que se había dejado la chaqueta, todos fueron corriendo hacia la silla ,y María sacó de su bolsillo el diamante que a noche encontró Jaime ,lo puso en hueco que no tenía diamante y…

    CONTINUA...

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  9. ¡Encajaba!No nos lo podíamos creer. Ainhoa regresó a por su chaqueta y vio que todos estaban en un corro, se acercó y nos preguntó que hacíamos ahí, todos nos quedamos callados y dijo Jaime: -estábamos pensando que te habías quedado aquí la chaqueta y como te la llevaríamos. Ainhoa nos miró mal a todos nos quitó la chaqueta de las manos y se fue. En el recreo estuvimos pensando cómo podríamos entrar en casa de Ainhoa. No se nos ocurría nada. Cuando de pronto vimos a Clara hablando con Ainhoa. Cuando terminaron su conversación Clara vino a decirnos lo que había estado hablando con Ainhoa.
    Clara había preguntado a Ainhoa cosas sobre su vida, ¿dónde vivía?, ¿si tenía hijos?, ¿cuál era su edad?... La había dicho que vivía en un chalet, tenía un hijo, el domingo fue su cumpleaños y había cumplido 26 años… No era nada sospechoso, pero vivía en un chalet y donde nosotros estuvimos a noche eran pisos así que decidimos seguirla cuando finalizaran las clases. Sonó el timbre. Todos subieron a la clase. A la salida se reunieron y decidieron seguir a Ainhoa hasta su casa. No nos mintió ella vivía en un chalet con un niño. Regresamos a nuestras casas y quedamos por la tarde en el parque que estaba enfrente de la casa de María a las 16:00.
    Así fue a las 16:00 todos estábamos allí. Fuimos a la casa de Ainhoa y vimos salir a Ainhoa con su hijo y su novio o al menos eso pensamos. Cuando apenas se veía el coche nos acercamos a la casa y observamos que la ventana que estaba al lado de la puerta estaba entreabierta saltamos la verja y nos metimos en la casa. La sorpresa fue cuando miramos a nuestra izquierda y vimos… ¡una foto de Ainhoa con la profe de matemáticas! No podía ser, las dos tenían el mismo collar, el de Ainhoa no tenía diamante así que pensamos, que eran hermanas y por eso las dos tenían el mismo collar Ainhoa lo perdió antes de que la profe desapareciera , y la profesora lo perdió en las escaleras del sótano. Tendríamos que seguir buscando. Clara se asomó a la ventana y vio a ¡AINHOA! Ya había regresado que haríamos. María encontró la puerta de la salida a el patio por la parte de atrás. Salimos corriendo y no nos vieron. Regresamos al parque que estaba enfrente de la casa de María. No se nos ocurrían más ideas, y fuimos a buscar a Eva. La portera no estaba en la entrada así que entramos todos. No encontrábamos a Eva así que bajamos al sótano silenciosamente y allí estaba Eva escondiendo algo detrás de su cuerpo, la preguntamos si podía ayudarnos en este momento y contesto rápidamente “NO”, así que empezaron las sospechas sobre Eva .¿Qué estaría ocultando? . Salimos de aquel edificio que no nos resultaba agradable, y de nuevo la señora que a noche nos regañó desde la ventana, lo hizo de nuevo. Aquella ventana desde donde se asomaba la señora correspondía al piso 2º A, teníamos que entrar en ese piso como fuera, porque no era normal que esa vecina siempre nos regañara y estuviera pendiente de cuando salíamos del edificio. Santiago y Jaime quedaron por la noche para entrar en la casa. Esta vez la portera estaba en la entrada así que esperamos a que entrara gente, y cuando entro una pareja nosotros fuimos tras ellos y no nos dijo nada. Subimos hasta el 2º A, no se oían ruidos así que Santiago, cogió una tarjeta de crédito y mientras Jaime empujaba la puerta la paso por la cerradura y ¡la puerta se abrió! Santiago no se aguantaba de lo nervioso que estaba y tuvo que ir al servicio. Jaime estaba muy asustado, pero espero fuera cuando de repente entró Eva y le vio. Jaime salió corriendo y logró escapar pero… Santiago se había quedado en la casa. Santiago salió del servició y se puso a buscar a Jaime por la casa, no estaba pero vio una foto de Eva y la portera. Santiago se disponía a salir del edificio cuando salió Eva de la sala que tenía el reloj de oro y le metió, allí estaba la portera, que le dijo…

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  10. Y le dijo... ¿qué hacéis aquí?
    La portera estaba muy nerviosa y nos dijo que nos fuéramos de allí. Mientras salíamos del portal pasaba Gabriela ya que después del colegio se fue a casa porque tenía clases particulares. Gabriela les preguntó que qué hacían allí y le contaron todo. Gabriela se quedó asombrada y no sabía qué decir ya que el director era amigo de su madre. Llamó a su madre para que Ainhoa no se quedara sola en el recreo y se integrara ya que sabía que nuestro grupo iba a encajar "bien". Gabriela estaba muy nerviosa y no sabía si decirles eso ya que Ainhoa no les había tratado muy bien al quitarle la chaqueta de las manos.
    Al día siguiente mientras estábamos en clase de Lengua , Josemi hizo salir a Gabriela y esta nos miró con mirada triste porque pensaba que nos íbamos a enfadar. En el cambio de clase fuimos todos a hablar con ella, pero Gabriela prefería hablar con Ainhoa. Cuando terminó de hablar con Ainhoa, Gabriela hizo una media sonrisa y se dieron un abrazo. Ese recreo Gabriela no estuvo con todo el grupo. Santiago y Jaime querían ir a hablar con ella pero ella no quería hablar con ellos…
    Así pasaron tres días durante lo que Gabriela seguía sin hablar con nosotros. Prefería cortar la amistad ella a que la cortaran ellos con ella. Todo esto hasta que un día Gabriela y Ainhoa quedaron para ir juntas al colegio. Ainhoa al pasar por nuestro lado nos dio los buenos días pero Gabriela ni nos miró. Estábamos muy tristes al pensar que Gabriela quería separarse del grupo por algo y queríamos averiguarlo. Todas las chicas no podían asimilar que una chica como Gabriela hiciera eso de un día para otro, no se lo podían imaginar. Lo que no sabían los demás era que Gabriela escondía un gran secreto y esta se separó de nosotros ya que ella no quería meternos en más problemas. Por eso se fue con Ainhoa, ya que ella lo sabía por Josemi. Santiago intuía que algo malo pasaba, pero Gabriela le pidió que no dijera nada ya que Santiago fue a hablar con ella a escondidas por si sabía algo que no dijera nada, porque tenía miedo... Si algún día se pudiera revelar ese secreto uno del grupo podría correr un gran peligro....

    Ángela Pascual

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  11. -He visto salir corriendo a un amigo tuyo, ¿me puedes explicar qué hacíais en el piso de Eva?
    -No, nada…
    -Mira, ya me estáis empezando a cansar, no quiero veros más por aquí a no ser que quieras que te pase algo.
    Santiago salió corriendo del edificio y fue a contárselo a los demás. Cuando supieron que la portera le había amenazado, sospecharon aún más de ella y de Eva, así que decidieron que esa misma noche entrarían todos al piso de Eva. Santiago se opuso porque tenía miedo de que le pasase algo como le había dicho la portera, pero entre todos le convencieron de que no le iba a hacer nada si permanecían todos juntos.
    Al llegar la noche, todos estaban en la parte de atrás del edificio de Eva esperando a que saliera de su casa, mientras tanto planeaban su estrategia.
    -Yo creo que deberíamos separarnos en dos grupos – dijo Jaime.
    -Tienes razón, uno que distraiga a la portera y otro que entre en casa de Eva – dijo Nuria.
    -Pero… ¿qué pasa con la vecina que siempre nos regaña? – dijo Elena.
    -De eso nos ocupamos Ángel y yo, nos quedaremos aquí y tiraremos piedras a la ventana para llamar su atención – dijo Lucas.
    -Vale, entonces María, Elena, Alejandro, Raúl y yo distraemos a la portera – dijo Gabriela.
    -Y Clara, Lucía, Nuria, Santiago y yo entramos al piso de Eva, mientras que Ángel y Lucas se quedan aquí– dijo Jaime.
    -Mirad ya sale Eva, chicos empezad a tirar piedras a la ventana – dijo María.
    El grupo que tenía que distraer a la portera entró en el portal y se metieron en el cuarto de la limpieza, y mientras la portera iba para sacarles de ahí el otro grupo cruzó rápidamente el portal y subió las escaleras. Antes de entrar al piso de Eva, se aseguraron de que la vecina estaba distraída, y así era ya que se oían gritos diciendo ``¡Maldita sea!´´
    La portera encerró al grupo que tenía que distraerla en el cuarto de la limpieza con llave, y les dijo que no saldrían de ahí hasta que no la contaran a que habían ido, y como María era claustrofóbica no pudo aguantar y se lo dijo. La portera subió al piso dejando al grupo encerrado en el cuarto de la limpieza.
    El otro grupo ya estaba dentro del piso, buscando lo que Eva escondía, de repente se oyó el ruido de la puerta de la entrada cerrándose y se apagaron las luces.
    -Chicos, ¿se ha ido la luz? – dijo Santiago.
    -No creo, - dijo Nuria – yo creo que ha entrado alguien…
    -Rápido, que alguien encienda su móvil – dijo Clara.

    CONTINÚA...

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  12. -Yo no tengo batería – dijo Jaime.
    -Ni yo tampoco – dijeron casi a la vez el resto del grupo.
    -Pues entonces juntémonos todos hasta que vuelva la luz – dijo Santiago.
    -La luz no va a volver porque no se ha ido – dijo una voz que no sabían de quién era.
    Entonces, todos muy asustados empezaron a correr sin saber a dónde. Y de repente se oyó un grito.
    -¿Qué ha pasado? – dijo Nuria.
    Y al instante se encendió la luz.
    -¿Quién ha hablado antes cuándo las luces estaban apagadas? – dijo Clara.
    -No lo sé, pero yo no veo a Santiago por ningún lado – dijo Jaime muy asustado.
    -Mirad una nota, voy a leerla en alto – dijo Lucía.
    ``Yo le dije a vuestro amigo que si os volvía a ver por aquí, le pasaría algo malo, y eso es lo que le va a pasar, si queréis encontrarle no tenéis más que devolver lo que habéis cogido´´
    Pero nosotros no habíamos cogido nada, o eso pensábamos hasta que Jaime dijo:
    -Cuando esta tarde yo estuve aquí con Santiago, cogí un teléfono que me parecía sospechoso, supongo que será a eso a lo que se refiere… - dijo Jaime.
    -¿Y tienes aquí ese teléfono? – preguntó Nuria.
    -Sí, me pareció sospechoso porque en todos los mensajes pone letras y números que no sé lo que significan – dijo Jaime.
    -Trae, déjamele – dijo Nuria – yo creo que esto son direcciones, mirad lo que pone: 5 der, 8 izq, etc.
    -Claro, der significa derecha y izq significa izquierda, ¿pero qué quieren decir? – dijo Jaime.
    -Pues no lo sé, pero deberíamos llamar al número que pone ``portera edificio´´ y decirla que la vamos a devolver el móvil – dijo Clara.
    -Pero… ¿y si la portera le ha hecho algo a Santiago? – dijo Lucía.
    -Eso no podemos saberlo, pero voy a llamar a este número – dijo Nuria.
    La portera les dijo que mañana por la tarde, tenían que estar en la puerta del edificio con el móvil si querían ver a su amigo Santiago, pero luego pensaron que le iban a decir a sus padres para explicarles lo que le había pasado a su hijo, y además, no sabían dónde estaba el otro grupo. Utilizaron el móvil que se había llevado Jaime para llamar al móvil de María, y así descubrieron que estaban en el cuarto de la limpieza. Después salieron del edificio y fueron a la parte de atrás.
    -¿Cómo qué Santiago ha sido secuestrado por la portera? – dijo Ángel.
    -Sí, y como no la demos mañana este móvil, dice que le matará – dijo Nuria.
    -Pero como va a matar a un niño… - dijo Lucas.
    -Ahora el problema es que le decimos a sus padres – dijo Lucía.
    -Pués les decimos que se va a quedar a dormir en mi casa y ya está – dijo Raúl.
    -Vale, entonces les decimos eso, ¿y quién se queda con el móvil? – dijo Clara.
    -Lo guardaré yo e intentaré descubrir lo que significan las direcciones – dijo Nuria.
    -De acuerdo, entonces mañana quedamos aquí a las 17:00 para hacer el intercambio – dijo Jaime.
    -Pobre Santiago, espero que no le pase nada – dijo Gabriela.
    -Conociéndole estará bien, pero conociendo a la portera… puede hacer cualquier cosa – dijo Alejandro.
    Y entonces cada uno se fue a su casa, excepto Raúl que fue a casa de Santiago para decirle a sus padres que su hijo iba a dormir en su casa.

    Ramiro Rua

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  13. Había que ver la cara de Raúl, porque conociendo al padre de Santiago todo podía salir mal. Raúl iba por la calle hablando solo, pensando en todas las posibles preguntas que le podría hacer el padre de Santiago y como responderlas. Pero armándose de valor llamo al timbre de la puerta, pero se llevo una agradable sorpresa, el padre de Santiago no estaba y hablo con la madre que no puso ninguna traba respecto a que Santiago se quedara a dormir esa noche en su casa. El peligro había pasado pero ahora quedaba lo peor que era rescatar a su amigo. Llamo por el móvil a Nuria para ver si podían verse e intentar descubrir algo de las direcciones que estaban grabadas en la memoria del teléfono. Nuria le dijo que sí, que se acercara a su casa con la excusa de llevarla algo que se le había olvidado en clase. Raúl fue todo lo deprisa que pudo ya que el tiempo corría en contra de Santiago. Llegó a la casa de Nuria, le abrió la puerta la madre de Nuria y le dijo que Nuria estaba en su habitación y Jaime subió por las escaleras y allí estaba Nuria sentada en la cama con el móvil de la mano haciéndose mil preguntas. Jaime la dijo – déjame un momento el móvil que voy a mirar una cosa que se nos ha pasado. Cogió el móvil y lo conecto al portátil de Nuria descargo todo el contenido de la memoria y de la tarjeta del teléfono en el portátil .La sorpresa de los dos amigos fue tremenda al ver unas carpetas ocultas que el móvil no se podían ver. Abrieron la primera carpeta y ¡que vieron sus ojos! Nombres, horarios, direcciones…Todo parecía indicar que era el esquema de un plan a seguir. Después abrieron la segunda carpeta, en esta carpeta había muchas fotos de joyas, y aunque ellos no eran unos expertos todo parecía indicar que eran de mucho valor. Por primera vez en muchos días la suerte les sonreía encontraron unas coordenadas, entre todos los datos que allí aparecieron. Lo que hicieron fue meter esas coordenadas en una aplicación en el portátil, y como llevaban toda la noche de sorpresa en sorpresa, aquí se encontraron otra. Las coordenadas correspondían a un viejo edificio muy cerca de allí, que estaba pendiente para su demolición. Los dos amigos se miraron con una mirada de complicidad, de las que uno sabe lo que está pensando el otro, y al unísono dijeron los dos – vamos a echar un vistazo. Pero se presentaba un problema engañar a la madre de Nuria. Que excusa la darían para salir a las nueve de la noche de casa los dos. Pero una vez más se les ilumino la bombilla, porque la dirían a la madre de Nuria que les había llamado al móvil Lucia, ya que tenía que llevar un trabajo al día siguiente, pero Lucia no podía llevarlo ya que estaba enferma, y ellos iban a hacerla el favor de recogerlo para entregarlo a día siguiente en clase. La mentira coló y la madre de Nuria no sospecho nada, pero les dijo que no volvieran tarde. Salieron corriendo para el edificio y cuando llegaron, casi sin aliento vieron que era una antigua fábrica de harinas. Había un pequeño problema para entrar a la fabrica, ya que estaba toda vallada por precaución antes de su demolición .Buscando otra posible entrada a la fabrica vieron como la verja estaba cortada y doblada,esa iba a ser su entrada, estaban salvados…

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  14. Pablo Villanueva Cuñado10 de febrero de 2012, 23:12

    Podían entrar así que llamaron a sus compañeros, vieron pasar un coche escoltado por dos motos y para que no les vieran se tiraron al suelo, al rato llegaron el resto del grupo y entonces se dispusieron a entrar en la fábrica, había un guardia de seguridad así que Raúl y Alejandro se quedaron a distraerle.

    Raúl dio una pedrada al guardia y empezó a perseguirles, el guardia dio la voz de alarma y salieron otros dos a ayudarle, entonces Raúl se cayó al suelo y Alejandro al intentar ayudarle fue apresado junto a Raúl, a Alex le dio un ataque de ira y le dio un puñetazo a uno de los guardias y aprovechando el mareo que le dio al guardia Raúl dio un golpe a la cabeza a los guardias quedándoles inconscientes.

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  15. Pablo Villanueva Cuñado10 de febrero de 2012, 23:12

    Mientras tanto el resto del grupo entró en el edificio, en el interior se escondieron en una sala para pensar que harían, Jaime que había traído su portátil y que era un hacker informático consiguió un mapa del edificio, primero subieron las escaleras, había dos pasillos así que se dividieron en dos grupos, en el primero estaban María, Elena, Clara y Jaime, y en el segundo Gabriela, Lucía, Nuria, Ángel y Lucas.

    El grupo uno fue hacia el pasillo de la derecha y el dos hacia el de la izquierda.

    El grupo uno encontró un laboratorio, donde parecía haber estado alguien recientemente, ya que la ventana estaba abierta y el suelo estaba lleno de agua caliente como si alguien lo hubiera fregado hace poco, Elena encontró una pulsera de oro o eso parecía, ya que Jaime acababa de encontrar unos frascos llenos de un líquido, el del primer frasco era verde y el del segundo rosa, y se dio cuenta de que al mezclarlos se obtenía una mezcla que parecía oro. Se percataron de que había unas huellas que eran de agua y que iban por el pasillo, así que decidieron seguirlas.

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  16. Pablo Villanueva Cuñado10 de febrero de 2012, 23:13

    Al llegar al final del pasillo se encontraron con el otro grupo.
    _ ¿Qué habéis encontrado? Dijo Lucas.
    _Hemos encontrado un laboratorio y en el había unas sustancias que al mezclarlas se obtenía un líquido parecido al oro, ¿Y vosotros? Dijo María.
    _Hemos encontrado unas piedras parecidas al diamante que encontramos el otro día. Dijo Gabriela.
    _Bueno sigamos con la investigación. Dijo Clara.

    Siguieron adelante hasta que de repente…
    _Buuuuuuuuhhhhhhhhh.
    _Aaaaaaahhhhhhhhhh. Gritaron todos.
    _Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja somos nosotros. Dijeron Raúl y Alejandro.
    _Nos habéis asustado. Dijo María muy asustada.
    _ Lo sentimos pero es que nos cogieron los guardias y les quedamos inconscientes y ya nos aburríamos allí así que hemos venido a ver que tal estabais.
    _ Alejandro, Raúl hemos descubierto un laboratorio, y unos líquidos…
    CLIN, CLIN CLIN…

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  17. Pablo Villanueva Cuñado10 de febrero de 2012, 23:14

    _ ¿Qué es eso? Dijo Lucas.
    _ ¿El qué? .Dijo Clara
    _ Ese ruido, parece venir de esa tubería rota…Dijo Lucas.
    _ Acerquémonos. Dijo María.
    _ OK. Dice Nuria.

    Al acercarse a la tubería oyeron una voz que parecía la de Santiago.
    _ ¿Eres tú Santiago? Dijo Nuria.
    _Si soy yo. Dijo Santiago.
    _ ¿Dónde estas?. Dijo Nuria.
    _ Estoy en una habitación toda blanca, llena de puertas y hay un montón de pasillos por donde ir. ¿Qué hago?
    _ ¡Tengo una idea |! Rompe el borde del jersey y saca una hebra de lana. Dijo Lucas.
    _ ¡Tú estás loco, mi padre me mata si rompo el jersey me lo acaban de comprar!
    ¡Mi madre dice que le ha salido una pasta el uniforme, así que ni hablar…!
    _ Tú mismo, pero tengo una idea para que salgas de ahí. Dijo Lucas.
    _ ¡Vale tío!, pero se lo explicas tu a mi padre después y vete buscando una buena excusa, que mi padre no se las tragan tan fácilmente… Dijo Santiago.
    _ Tira el hilo por la tubería, aquí abajo está rota y voy a pasarte mi móvil. Dijo Lucas.
    _ Átalo bien Lucas y súbelo despacio. Dijo María.

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  18. Pablo Villanueva Cuñado10 de febrero de 2012, 23:15

    _ ¡Lo tengo, chicos!, Ahora que… Dijo Santiago.
    _ Sigue mis indicaciones. Dijo Lucas.

    Santiago se dirigió a la primera puerta que había a su derecha y después giró la segunda a la izquierda, siguiendo hacia delante por el pasillo de la derecha.

    El resto del grupo bajo hasta recepción, esperado en la puerta del ascensor por el que tenía que bajar Santiago, según Lucas.

    Santiago siguió andando hasta encontrase con el cuarto de la calefacción, allí giró finalmente a la derecha y se topó con el ascensor por el que tenía que bajar.

    _ Móntate y dale a la planta baja. Dijo Lucas.

    _ Vale, ya estoy. Ya veréis lo que he encontrado, os vais a quedar alucinados. Dijo Santiago.

    _ Date prisa Santiago, me estoy poniendo muy nerviosa. Me acabo de acordar que cuando os esperábamos vimos entrar un coche con escolta y dos hombres. Pero todavía no nos los hemos cruzado y que yo sepa nadie ha salido del edificio…Dijo Nuria

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  19. Pablo Villanueva Cuñado10 de febrero de 2012, 23:15

    BUFFFFFFFF

    _ La luz, ¿Quién es el bestia que ha apagado la luz? Dijo María.
    _ DIJE QUE OS ARREPENTIRIAIS.

    De repente volvió la luz y la puerta del ascensor se abrió.

    ¡Aaaaaaahhhhhhhh!

    Santiago estaba muerto y en su mano tenía algo.

    _No puede ser, no puede estar muerto. Dijo Clara.
    _ Me acercare y le tomo el pulso. Dijo Lucas.
    _ ¿Esta muerto? Dijo Clara.

    _ Eso me temo chicos. ¿Qué es esto que tiene en su mano? Es una foto parece… No, no puede ser es Ainhoa y … Eva con la sustancia que parece oro y las piedras esas y al fondo de la habitación hay una bandera alemana.

    BOOOOOOOMMMMMMMM

    _Chicos vámonos el edificio se está destruyendo. Dijo Elena.
    _ No podemos dejar ahí a Santiago. Dijo Ángel.
    _Es verdad. Dijo Jaime.
    _No nos que da otra salgamos. Dijo Gabriela.

    _Nos ha faltado poco. Dijo Lucas.
    _Siiiiii, poquísimo. Dijeron el resto.
    _ ¿Y Santiago? ¿Qué vamos a decir? Dijo Lucía.
    _Chicos volvamos a casa de Nuria, por Santiago ya no podemos hacer nada.

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  20. This story is very well I love this, I will recommend it to friends

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  21. I am from Russia but I speak in English because I do not suppose you know Russian

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  22. Я из России, но я говорю на английском, потому что я не думаю, вы знаете русский

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  23. -¡¡¡AYUDAAAA, AYUDAAAAAAAA!!!

    -¡Santiago!-gritaron todos a la vez sorprendidos de tal hazaña.

    -Pensamos que estabas muerto.-dijo Lucas tan sorprendido o más por la aparición de Santiago.

    -Y por poco no lo estoy. Cuando la luz se apagó la maldita portera me dio con algo en la cabeza muy fuerte y me desplomé. Cuando estaba empezando a recuperarme vi que el edificio se me venía encima y salí arrastrándome.-dijo Santiago aún temblando del miedo.

    -Pero ya estas bien y eso es lo que importa.-dijo Gabriela medio llorando de la emoción de ver a su amigo vivo.

    -Chicos a mi esto me ha parecido la gota que colma el vaso. No si voy a seguir con esto, me parece demasiado para nosotros.-dijo Santiago.

    -Y que pretendes dejar esto y que se vaya tan contenta la que te ha hecho esto. No me lo esperaba de ti Santiago. Pues sabes qué, que yo no me rindo tan fácilmente y que si tú o los demás os queréis ir, adelante, iros pero yo me quedo aquí, hasta el final.-Dijo Jaime lleno de rabia ya que no daba crédito a lo que su amigo le decía.

    -Pero no estamos hablando de un juego Jaime, estamos hablando de nuestras vidas.-Dijo Santiago un poco molesto por la contestación de su amigo.

    -Y que pasa que la vida de nuestra profesora no es importante para ti. ¿Qué piensas que su familia no estará sufriendo?-Dijo Jaime finalmente y se fue.

    Clara y Raúl lo siguieron porque a todo el grupo se le quedó grabada la frase de “su familia está sufriendo” y todos sabían que hay Jaime tenía razón.

    A la mañana siguiente llegaron Santiago y Raúl juntos ya que Santiago supuestamente se había quedado ha dormir con él y lo primero que hizo Santiago fue ir ha hablar con todos.

    -Chicos quiero pediros perdón por lo que dije ayer. Acababa de salvarme la vida por los pelos y no sabía muy bien lo que decía así que como tu dices Jaime lo vamos ha hacer por la profesora y por su familia-Dijo Santiago muy emocionado.

    Jaime y Santiago sonrieron juntos y a la vez.

    Al llegar la hora del recreo, las chicas, escucharon que alguien estaba llorando en el baño. Era Ainoa. Clara la preguntó que qué le pasaba pero ella se fue corriendo y llorando.

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  24. Se lo contaron al los chicos pero no prestaron mucha atención porque habían descubierto algo más importante que los llantos de una profesora. Lo que había descubierto era la bandera de la provincia de Palencia. Estuvieron estudiando concentraciones científicas y descubrieron que hace dos años en Palencia hubo una concentración para saber como se podían obtener composiciones liquidas de metales importantes y también vieron que esa concentración la había ganado Ainoa y que una miembro del jurado era Eva. Lo que no entendieron era unas letras que ponían en motivo: FMP…

    Que significarían esas letras… Buscando y buscando encontraron algo que al principio no entendían pero muy bueno no era. Supuestamente significaban: Fines Metálicos Peligrosos.

    Para que querría alguien metales para el peligro…

    Todos decidieron por el bien de Santiago no investigar más esa tarde.

    A la mañana siguiente cuando se dirigían a clase vieron una cosa que les choco un poco. Santiago tenía la cabeza de COLOR ORO.
    Gabriela y Jaime corrieron a decírselo y Santiago fue a verse al servicio. Así era, Santiago tenía la cabeza color oro y no sabía porque. Estuvieron pensando hasta que al fin a Clara se le ocurrió porqué podía ser.

    -Santiago, tu dijiste que te habían golpeado la cabeza con algo duro.-dijo Clara como preguntándole.

    -Si pero eso que tiene que ver con mi pelo.-dijo Santiago confuso.

    -Pues que quizás te golpearon con el tarro de cristal de la mezcla que hicimos de oro y se cayó algo de líquido y por eso se te a puesto la cabeza de ese color.-dijo con un toque de inteligencia.

    -Bueno… eso es imposible porque y me lleve el tarro.-dijo Lucas.

    -Pues entonces las otras personas que sabían de la existencia de ese tarro eran Eva y Ainoa.-dijo Gabriela.

    -Pero Ainoa tenía reunión de profesores como los demás, y Eva tenía que trabajar y no creo que falte a su traba por unos niños a los que ha ayudado sabiendo que otra persona esta con nosotros.-añadió Clara.

    -¿Y si preguntamos a Josemi si ayer fue Ainoa a la reunión?-dijo Raúl

    -Pero alo mejor no nos lo quiere decir.-dijo Gabriela.

    -Pero si no probamos…-Dijo Jaime.

    A la mañana siguiente fueron a buscar a Josemi y se lo preguntaron. Para sorpresa de todos Ainoa no había ido a la reunión porque se encontraba mal. Los chicos planearon ir a casa de Ainoa para ver si de verdad estaba mala pero con qué excusa…
    Se les ocurrió que como para el siguiente día que tenían clase con ella había un examen podían ir a su casa para preguntarla algo sobre la lección.

    Por la tarde fueron a casa de la profesora Clara, Nuria y Gabriela. Las abrió la puerta un niño pequeño, muy simpático que al preguntar por Ainoa la dijo que su mamá estaba en el salón. Las chicas pasaron y, otra vez, la vieron llorando. Ainoa sorprendida las preguntó:

    -¿Qué hacéis aquí?

    -Es que… nos han surgido dudas del examen y como no ha venido pues no se lo hemos podido preguntar.-dijo Nuria un poco tímida al ver llorar a su profesora tan desconsoladamente.


    -Tranquilas por el examen. Mañana tampoco iré. Estoy enferma.-dijo Ainoa medio llorando.

    -Ainoa nos lo puedes contar. No diremos nada y yo creo que necesitas desahogarte. No nos dijiste nada el otro día en el baño y te fuiste corriendo.-dijo Gabriela intentado ayudarla.

    -Je… je- dijo no muy motivada- no lo entenderíais, sois solo niñas. Además no podéis hacer nada.-dijo Ainoa sin saber bien que decir para que no se molestaran más por el tema.

    -Confíe en nosotras Ainoa, no diremos nada.-dijo Nuria.

    -Para todo hay solución.-dijo Clara muy positiva.

    -Está bien, os lo contaré…

    MARINA PÉREZ PRIETO

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  25. Ayer cuando me disponía a dar la merienda a mi hijo, las paredes de casa temblaron. Salí corriendo y el edificio de enfrente se había derrumbado. Retrocedí para coger la cámara de vídeo, para enseñaros después del examen las imágenes de las ruinas. Me tropecé con una caja que ponía "residuos tóxicos (trastorno del sueño)" y por eso no asistí a clase, porque ahora duermo por el día y por la noche estoy despierto.

    Tengo que encontrar a la persona que hizo esta fórmula.

    -Mandaré un mensaje a mi primo que tiene veinte años. -Dijo Nuria.

    Vive en Burgos y es un empollón en química. Ha hecho varios descubrimientos y le han dado un montón de premios. El podrá resolver tu problema, es la persona adecuada.

    Ainhoa dijo a las chicas que tenía que salir a comprar. Las chicas se despidieron preocupadas.

    La profesora se sentía peseguida y cuando miró para atrás...

    Javier Hernández Durán

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  26. ... Vio un hombre que le resultó conocido. Las chicas, que aun seguían a la puerta de la casa de Ainhoa, vieron como esta disminuía la velocidad de su paso notablemente para que él pudiera alcanzarla. Se saludaron y hablaron durante unos segundos, entonces, de repente Ainhoa dejó de hablar y dio media vuelta para dirigirse de nuevo hacia su casa. Mientras tanto, aquel hombre la esperaba apoyado en la pared. Al ver que Clara, Nuria y Gabriela seguían cerca de su casa, les dijo:
    -¡Chicas!, ¿Todavía por aquí?-y sin esperar una respuesta añadió-Veréis, con esto que me ha ocurrido se me olvidan mucho las cosas... ¡Casi dejo ha mi hilo solo en casa! Con lo pequeño que es...
    Agarró al niño de la mano y se lo llevó. Luego se dirigió hacia aquel hombre, que era el mismo con el que la habían visto unos días antes, dejó al niño con él y se despidió para poder continuar su trayecto. ¿Por qué no se habría llevado a su hijo con ella si solamente iba a comprar?
    Clara, Nuria y Gabriela seguían hablando.
    -¿De verdad tienes un primo que es científico?- Le preguntó Clara a Nuria.
    -No, ¿Pero de verdad tiene ese trastorno del sueño del que hablaba?- y respondiendo a su propia pregunta añadió.- Yo creo que no.
    -¿Por qué lo crees?- Quiso saber Gabriela.
    -Veréis, lo primero es que lo que nos a contado no tiene nada que ver con no tiene nada que ver con lo que hemos encontrado...
    -Ya, pero aun así podría ser cierto.- Comentó Gabriela, a la que las razones de Ainhoa habían convencido completamente.
    -Vale, vale... pero déjala acabar.-dijo Clara muy interesada por la conversación.
    Nuria continúo hablando.
    -... segundo: cuando hemos entrado en su casa no estaba durmiendo, ni parecía que lo hubiera hecho o lo fuera a hacer, solo estaba llorando.Si está tan mal tendríaque habérselo dicho a alguien para que cuidara que cuidara de su hijo, o de ella. No debería quedarse sola en casa.
    -Pero ya has visto como dejaba a su hijo con ese hombre para que se encargara de él, porque seguramente ella no...-dijo Gabriela, que ya no estaba atan segura de que Ainhoa les hubiera dicho la verdad.
    -¡ssssshhh! –la hizo callar Clara.
    Nuria se estaba cansando de que la interrumpieran y comenzó a hablar más rápido para acabar cuanto antes.
    -...tercero: si tiene tanto sueño por él día ¿Por qué va a comprar ahora, sola y andando? Alguien debería llevarla. Además ¿que es eso de que se tropezó con una caja de residuos tóxicos? Estoy segura de que hay no había nada...

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  27. Gabriela iba a decir que lo de los residuos tóxicos no parecía tan raro después de lo que habían encontrado, pero pensó que sería mejor callarse.
    -Y, además, ¿Por qué quería enseñarnos las fotos de las ruinas de un edificio? Me parece que se lo ha inventado.
    Nuria no dejaba de hacer preguntas para responderlas ella misma, cosa que estaba molestando a Gabriela porque ella también quería hablar. En ese momento un coche que iba a demasiada velocidad dio un frenazo y paró. De el bajó una persona, no se sabía si era un hombre o una mujer. Llevaba unos vaqueros negros y una chaqueta del mismo color, quizá algo más clara, con una capucha que la cubría la cabeza. Las chicas no le dieron mucha importancia, de lo único que se dieron cuenta fue del sonido que hizo al frenar. Clara se percató de que aquella persona se dirigía hacía ellas y empezó a ponerse nerviosa. Nuria le dijo que no se preocupara, pero que si lo prefería se irían de aquel lugar, se alejarían de la casa de Ainhoa. Empezaron a caminar, pero cuando Clara miró hacia atrás vio que aquella persona las seguía a corta distancia y aceleró, sus amigas se fueron quedando atrás pero Clara tenía demasiado miedo para ralentizar su paso. De repente, Nuria sintió como una mano helada la agarraba el hombro y tiraba de ella, no pudo evitar dar un grito, al que le siguió otro de Gabriela, que también se había asustado. Clara, a la que ya una considerable distancia separaba de sus amigas, sacó valor de donde pudo y corrió hacia ellas para ayudarlas. Aquella persona se llevaba a Nuria ala fuerza, pero entre Clara y Gabriela consiguieron liberarla. La misteriosa persona, que mientras ayudaban a Nuria les había parecido una mujer, se había montado en su coche y la habían perdido de vista entre las calles.
    -¿Estás bien Nuria?- Le preguntó Gabriela.
    - No, no estoy bien, no estoy nada bien.

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  28. -¿Quieres que nos vayamos a casa?
    -Sí, digo no, bueno, mejor sí,.. ¡No!, no quiero irme a casa. Si nos vamos a casa ahora posiblemente no volveremos a ver ese coche, y quiero llegar al fondo de esto.
    -Nuria, vámonos a casa, por favor.-Pidió Clara que casi estaba más asustada que ella y le daba miedo volver sola.

    -Venga Nuria, vámonos a casa, es imposible que consigamos resolver esto. Tenemos demasiadas cosas: Aurora, la profesora de matemáticas desaparecida, Eva, Ainhoa y la portera sospechosas, piedras que parecen diamantes, un líquido similar al oro que es el causante de la desgracia de Santiago y todo ello súmalo a lo que nos acaba de pasar... ¡Es demasiado!-Dijo Gabriela.
    -Tienes razón-admitió Nuria-Pero por lo menos podemos quedarnos a ver cuando vuelve Ainhoa, solo son las cinco y media. Mientras tanto podemos tomar algo en aquella cafetería.
    Clara llamó por teléfono al resto del grupo; primero a Santiago, que estaba en casa de Lucas, intentando arreglar lo de su cabeza de oro para que nadie se enterara de lo ocurrido. Lucas y Santiago ya iban hacia la cafetería. Luego a Lucía, que le dijo que estaba en el parque con la pandilla, esperando a Elena, que debía de estar allí hace media hora, pero no cogía el teléfono y en casa no sabían nada de ella.
    -Jaime y Ángel han ido a buscarla. Les llamaré para que vayan con vosotras. Esperadnos allí, llegamos en diez minutos.-Les contó Lucía.
    Clara les informó de lo que pasaba a Nuria y Gabriela.
    -¡Ya os dije que esto era demasiado para nosotras! ¡¿Dónde estará Elena ahora?!-Dijo Gabriela muy preocupada.
    Cuando todos llegaron a la cafetería Nuria les explicó que una mujer había intentado secuestrarla. Llegaron a la conclusión de que esa misma persona podía haberse llevado a Elena. Eso era un problema más que se sumaba la lista que incluía la desaparición de la profesora, la cabeza de Santiago, el líquido que parecía oro y las piedras que se asemejaban a diamantes.
    El móvil de Santiago sonó. El identificador de llamadas decía que era Elena, pero al otro lado de la línea sonó la voz de Aurora, la profesora de matemáticas.
    -¿Dónde estas?, ¿Dónde esta Elena?, ¿Quién ha hecho esto?...-Santiago hablaba muy deprisa, al contrario que Aurora, que susurraba y hablaba muy bajito, como si tuviera miedo de que alguien pudiera oírla.
    Lucía le quito el móvil a Santiago y le dijo que se tranquilizara.
    Se podía escuchar la respiración de la profesora, como si estuviese esperando algo para empezar a contarles lo ocurrido y al fondo otra voz conocida, pero no era la de Elena.

    Aurora comenzó a hablar.
    -Vuestra amiga esta aquí, esta bien, pero no puede ponerse porque aquí hay una mujer que...

    CAROLINA PRÉJANO

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  29. нет, нет и не исключено, что это воскресший Сантьяго глупый думал, что это был серьезный роман. я был разочарован с ней. Сейчас мне нравится больше, что б так, чтобы реанимировать не убил его.

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  30. We invite you to continue reading our novel...it's only literature and it could change in only two words. It's fairly sure that you'll enjoy it finally. Tell us at the end...

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  31. Que de que –chillo Santiago.
    Puuuuuuuu puuuuuuu- sonó el móvil.
    ¡Nos ha colgado!- volvió a chillar Santiago
    De repente sonó el teléfono.
    ¡Un mensaje!- chillaron todos.
    Pero cuando Santiago miro el teléfono se puso a llorar Era una foto de su amiga Elena partida a la mitad por una espada y debajo de la foto ponía el juego ha empezado.
    Todos se echaron a llorar y Nuria dijo:
    Ya os dije que era muy peligroso y que lo dejáramos -dijo sollozando- pero no me hicisteis caso.
    A la mañana siguiente había un mensaje en el despacho de Josemi para Lucia, Raúl, Jaime y María que decía:
    Si queréis volver a ver a Josemi, Pepa, Ainoa, Aurora, Clara, Lucas, Nuria, Santiago, Ángel y Alejandro tendréis que venir a la c/ real de abajo s/n en la antigua fábrica de coches. Si no vais todos o no les liberáis a partir de la cuatro y media; cada hora liquidaremos a dos rehenes empezando por vuestros amigos.
    Todos los amigos presentes dijeron que tendrían que ir armados y preparados a sí que dijeron que tendrían que comprar cuchillos o navajas por si era una trampa.
    A las cuatro y media se encontraron en la puerta de la fabrica ya entendieron porque querían esa fabrica ya que a un radio de diez kilómetros solo había una parada de bus. Había cinco puertas pequeñas y una mucho más grande cada una con un nombre menos la grande que era solamente azul y encontraron una nota que decía con un gran rotulo:
    Norma que hay que cumplir
    Prohibido armas, mochilas y móviles si lleváis armas dentro mataremos a todos incluidos a vosotros. Si viniera alguien a ayudaros morarais todos.
    De repente sonó una alarma eran las cinco y media por una ventana cayeron Lucas y Santiago cortados por la mitad como Elena. Y de repente salió una diminuta televisión apagada
    De repente se encendió la tele y salió la el cuerpo de Elena unido otra vez pero el cuello tenía una especie de collar atornillado que levantaba su cabeza del cuello a través de una barra y dijo:
    Tirar las armas, dejar las mochilas y romper los móviles si no lo hacéis moriréis-de repente vieron los láseres de n ametralladora automática en sus corazones. Cuando dejaron las armas la cabeza de Elena empezó a dar vueltas poniéndose los ojos blancos. Cuando se quisieron dar cuenta la cabeza había salido disparada y en ese instante callo el cuerpo partido a la mitad pero con un ligero detalle que era que le faltaba el corazón.
    Raúl se acerco a los cadáveres sin vida de Santiago y Lucas, y chillo:
    En los cuerpos de Santiago y Lucas también falta el corazón.
    Jaime calculo y dijo:
    En la nota decía:” cada hora liquidaremos a dos rehenes”
    ¿Qué quieres decir?-dijo María angustiada
    Pues que nos quedan nueve horas ya que eran diez rehenes y han matado dos-contesto Jaime

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  32. En ese instante añadió un megáfono de la fábrica con una voz familiar:
    Ya es tarde son las seis y cuarto os queda poco y los siguientes serán Nuria y Aurora.
    Decidieron entrar en la fábrica rápidamente cada uno por su respectiva puerta.
    Cuando entraron se escucho el cerrojo y más tarde se escucho por la megafonía: este juego es muy simple son combates a muerte el premio la vida. Si no continuáis con el juego moriréis de inmediato y si no andáis por el camino moriréis; el que gane cada uno de los combates avanzara con la posibilidad de elegir una arma.
    Todos avanzaron hacia delante hasta que llegaron a una sala llena de armas cada sala era distinta ya que eran distinto tipo de armas Jaime cogió una katana, Raúl una naguinata, Lucía una ballesta y María un cuchillo de ante brazo a su vez todos tenían un reloj que contaba las horas que quedaban de vida que de repente se escucho un pitido y luego una voz dijo que ya solo quedan seis horas y aparecieron la mismas características de la foto de Elena solo que eran Josemi, Pepa, Ainoa y Alejandro. Entonces se entro en una sala de combates y por desgracia en la primera ronda de combates se enfrentaron Jaime contra Clara, Aurora contra Raúl, Nuria contra Lucía y María contra Ángel.
    Después de unos duros combates ganaron Jaime, Aurora, Lucía y Ángel.
    En la siguiente ronda combatieron Ángel contra Aurora y Lucía contra Jaime. Pero a diferencia de los combates anteriores todos tenían un arma blanca de pelea cuerpo contra cuerpo y un arma de asalto con un cargador de mil balas. Lo que complicaron las cosas ya que ha hora podían atacar de cerca y de lejos. Otro problema era el lugar de combate eran dos bosques nevados que eran bastante amplios. Esta vez hubo un gran cambio en la masacre ya que lucía y Jaime se rindieron por que los dos estaban enamorados del otro por desgracia su amor duro unos escasos segundos en los que se besaron a un francotirador apostado en una de las copas de los pinos le dieron la orden de matarlos pero este les concedió unos escasos segundos más que les utilizaron para matarle e intentar salvar sus vidas pero fue en vano ya que había más francotiradores apostados en todo el bosque y también había torretas defensivas a sí que decidieron hacerse el anakiri dando la victoria a Ángel y Aurora.
    En este último combate fue el más difícil ya que tenían una gran cantidad de armas y además era una selva ecuatorial con grandes zulos con armas blancas, armas de fuego, munición, granaderos y granadas cegadoras. Esta vez no había ni torretas ni francotiradores simplemente no había nada ya que había peligro de que les atacaran las guerrillas indígenas.
    Este combate acabo con la derrota de Aurora. Ángel creía que ya había acabado todo pero cuando se dio cuenta vio que le quedaba otro combate con una enemiga especial que no se podía imaginar que iba ser una de las monjas ninjas de la leyenda urbana que se contaba en el colegio que decía que la fundadora del colegio a la vez congrego la secta de monjas ninjas. Cuando empezó el combate Ángel se rio solo tenía una marioneta que controlaba con diez hilos enganchaos cada uno a un dedo. Pero nada más empezar el combate ya estaba derrotado y muerto. Pero cuando perecía ante un taque de las cuchillas envenenadas de la mano de la marioneta oía una voz muy familiar de lo más familiar, era su madre que le decía que por fin había despertado del coma que le produjo el golpe del camión que recibió poco después de cumplir cinco años llevaba unos veinte días en coma su madre se alegro tanto que no le quedara ni una mísera secuela.


    DAVID PÉREZ SASTRE

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  33. -Ángel, Ángel, despierta-repetía su madre.
    -No, no, Lucía…Elena…. han muerto…es una masacre…tengo que salvar a los demás.
    -Ángel despierta.
    -¿Dónde estoy, que ha pasado?
    -Es una pesadilla hijo, estás bien. Ayer por la tarde te trajeron Santiago y Lucas, te habías mareado y tenías un fuerte dolor de cabeza, te di un analgésico y has estado durmiendo diez horas.
    Ángel se incorpora, parecía que había pasado un tren por encima de él. Le dolía todo el cuerpo y se sentía ligeramente mareado. Sentado en la cama se puso a recordar, ¿Qué había pasado ayer? Sí ahora recordaba, había ido con Jaime en busca de Elena que no cogía el teléfono, pero no la habían localizado en ninguno de los lugares que solía ir y al parque no llegó como tenía previsto. Después, se había reunido con el grupo y Santiago les había dicho que Elena había desaparecido y que Aurora había hecho una llamada desde el móvil de Elena, una llamada misteriosa, donde se oía su voz ahogada, entrecortada y llena de temor. Los chicos se habían quedado helados sin saber que decir y Núria y Gabriela habían comenzado a llorar desesperadamente invadidas por el pánico que les produjo la llamada de Aurora y el saber que Elena había desaparecido.
    -Basta ya-había dicho Nuria-nos podemos seguir investigando por nuestra cuenta, es muy peligroso, mañana hablaremos con Josemi.
    Luego él notó un fuerte dolor de cabeza y un mareo que le hizo ver que todo daba vueltas a su alrededor y ya no recordaba más que esa horrible pesadilla que le había parecido tan real.
    Ángel se dio una ducha y después de arreglarse se puso en marcha para ir al colegio, pero al abrir la puerta oyó la voz de su madre.
    -Ángel, espera un momento por favor.
    -Sí, ¿mamá que quieres?
    -Ángel, no puedes seguir llegando todos los días tan tarde, estás agotado, se te ve distraído, creo que no te centras en los estudios, a los cuales estás dedicando poco tiempo, ¿Qué te pasa?
    -Nada mamá, ya sabes que en el colegio estamos muy liados con las reuniones que tenemos con Pepa, estamos preparando el nuevo concurso de narrativa, es my importante, pues si ganamos pasaremos al nivel europeo, es una gran oportunidad para los chicos que les gusta escribir. Pepa nos está dando unas pautas a seguir, que libros debemos consultar, formas de escribir, en fin mamá no te aburro más. Adiós-y dando un beso a su madre salió de casa.
    Cuando llegó al colegio le estaban esperando Gabriela. Nuria y Santiago.
    -Hola chicos.
    -¿Qué tal estás Ángel? ¡Vaya susto que nos diste ayer!
    -Ya estoy bien, ayer apenas había comido y con el estrés que tenemos y la impresión que me causó saber que Elena había desaparecido, hizo que perdiera la noción de la realidad y… bueno chicos ya está olvidado. ¿Quién va a hablar con Josemi?
    -Yo-contestó Nuria-cuando termine su clase de naturales, le preguntaré directamente.

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  34. Entraron en clase, Josemi llegó de buen humor, dio su clase y cuando se disponía a marchar Nuria dijo:
    -¿Josemi, puedo hablar contigo?
    -Sí, como no Nuria, tú dirás.
    -Mira queremos saber que tal está Aurora y cuando va a volver.
    -Aurora está bien, ya sabéis que ha tenido unos problemas familiares y necesitan su ayuda, pero en cuanto se solucionen volverá con vosotros, por cierto no sabía yo que la queríais tanto, debe de ser muy buena, pues parece que casi estáis suplicando su vuelta, se lo diré, la hará mucha ilusión-dijo con una sonrisa un tanto burlona.
    Todos miraban con caras serias y apenadas intentando trasmitir el miedo y la angustia que sentían.
    -Josemi, no sé-dijo Gabriela.
    -Dime Gabriela, ¿Qué no sabes?
    -Desde que falta Aurora están pasando cosas muy raras. No podemos entender como ningún profesor se da cuenta.
    -¿Cosas raras? ¡Qué tonterías dices Gabriela!, entiendo que la echéis de menos, pero de eso a ver cosas raras...- y añadió-haber, dime alguna de esas cosas raras que vosotros veis.
    -Pues lo último-dijo Gabriela-la desaparición de Elena.
    -¿La desaparición de Elena?-contestó Josemi, pero si ha llamado esta mañana su madre y que no va venir hoy al colegio.
    Los chicos se miraron unos a otros sin saber que decir.
    -Bueno chicos, ya veo que vuestro problema ha desaparecido o mejor dicho la desaparecida ya apareció. Hasta mañana.
    -¿Habéis oído lo que ha dicho Josemi, como puede ser que le haya llamado la madre de Elena?-dijo incrédula Nuria.
    -Tenemos que confirmarlo, a la salida del colegio quedamos para llamar a Elena, ¿de acuerdo chicos?
    Todos estaban de acuerdo deseando que acabaran las clases para comprobar que Elena estaba en casa sana y salva. En la case de lengua Pepa les preguntó que tal iban con el relato para el concurso, si ya habían pensado un tema.
    -Sabed que tenéis que emplear a fondo vuestra imaginación, no seáis repetitivos, tienen que ser historias diferentes, saliros de lo cotidiano y dejar volar la imaginación, pensar que lo real a veces se confunde con lo imaginario sin saber como sucede.
    ¿Qué querrá decir? Pensó Lucía que cruzó su mirada con la de Jaime. La clase pasó rápidamente y tocó el timbre. Los chicos fueron saliendo y esperándose en el patio, cuando ya estaban todos comenzaron a andar rápidamente deseando estar fuera para llamar a Elena.
    -Venga, ¿Quién llama?-dijo Nuria.
    -Tú misma-la contestó Ángel.
    Núria marcó el número que se sabía de memoria, el tono sonó una vez y otra y otra y otra más. Saltó el contestador, este teléfono está apagado o fuera de cobertura.
    -Oh, no tanta tensión y tanto esperar para nada, Elena no cogió el teléfono.
    -¿Qué hacemos?-dijo Alejandro.
    -Vamos hasta su casa-contestó Gabriela-yo no espero más, Josemi dijo que su madre le había llamado, tenemos que comprobarlo.
    Cuando iban caminando para coger el autobús el teléfono de Nuria sonó: era un mensaje, perpleja dijo: ¡es de Elena!
    -Léelo, léelo por favor- contestaron todos a coro.
    Nuria se puso a leer el mensaje:
    “Chicos estoy bien, por favor no me llaméis, las cosas son más sencillas de lo que parecen”

    INMACULADA RODRÍGUEZ

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  35. Los chicos la hicieron caso pero Lucas y Jaime vieron como Santiago se alejaba del grupo de forma disimulada ellos también los siguieron con cautela y vieron como se metió en unos viejos almacenes lo siguieron y vieron a Elena atada a una silla escoltada por Raúl Ainoa y Josema Santiago se reunió con ellos y se pusieron a hablar vieron que disponían de múltiples armas blancas y pistolas metralletas m-16 y muchas mas armas Lucas dijo a Jaime ya entiendo lo que nos dijo Josemi él estaba detrás de todo esto Lucas debemos hacer algo no podemos dejar a la pobre Elena aquí quien sabe lo que la harán.
    Jaime tienes razón mi padre tiene una pistola es policía dijo Lucas y Jaime exclamo ¡yo puedo coger cuchillo de mi casa ¡muy bien nos reuniremos en el parque de la avenida de Soria con el arsenal y rescataremos a Elena, bienasí será adiós dijo Lucas adiós respondió Jaime.
    Mientras tanto el resto del grupo se percato de que Lucas, Jaime y Santiago no estaban con ellos les buscaron y les encontraron ni el parque dijeron donde estabais estabamos preocupados e y Santiago dijo Alejandro os lo contaremos todo y así fue tras la historia dijeron que buscaran armas y móviles necesitarían mas gente y personas que les proporcionaran armas y comunicación.
    Una vez en los almacenes Nuria Ángel Clara Lucia Gabriela se quedaron con los móviles y los demás entraron Lucas con un m-16 un puñal Alex con un uci con silenciador los tres entraron y vieron a Santiago solo le dispararon en la mano soltó el arma y los apuntaron en la cabeza Lucas le chillo ¡!que demonios le hacéis a Elena Santiago se rio y dijo morirá Gime que le gustaba Elena estalo y lo empezó a disparar a bocajarro hasta dejarlo en un gran charco de sangre Alex dijo jojana que se fastidie Lucas dijo yo le odiaba con sus padres perfectos era el niño perfecto y ahora adiós muy buenas jojana.
    Los de fuera avisaron alas de dentro Josemi y Raúl venían en un coche y ellos que arian se escondieron y esperaron entraron Josemi y después Raül Alex se dispuso a disparar a josemi en la cabeza pero Lucas movió la cabeza diciendo que no lo hiciera .los siguieron hasta una sala en la que estaba Elena escoltada por Ainoa josemi Raül …!! Nuria!!se percataron de que se lo IVA a contar y dijo Josema buscadlos y matad los fueron a por los de fuera y se fueron a por armas de la tienda del tío de Lucas se armaron con chaleco antibalas ucis metralletas puñales granados cegados un rifle de francotirador una escopeta recortada y una granada de piña.

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  36. Fueron ala fabrica y josemi dijo donde esta Lucas es que tiene miedo y de repente sonó pummmm la cabeza de Josemi fueatrabesada por una bala y los demás empezaron a dispárense el pobre ángel fue herido en el costado y Gabriela que estaba de ayudante en el hospital publico con su tía le intento corta la hemorragia Jaime dijo redaos ya pero nadie contesto Lucas grito por el walki-talky y dijo chiscos a rescatar a Elena vieron a Ainoa y los demás muertos y Jaime dijo esto a molado mas que el puente de asalto de halo reach Lucas le dijo Jaime no te flipes bueno algo que estamos rescatar a Elena buscaron a Elena por todo el almacén en todas las salas en todos los alrededores pero nada no la encontraron se entristecieron y pensaron pero que a pasado a donde ha ido Jaime exclamo espera me pareció ver araul solo herido no muerto del todo Alex exclamo él se la a llevado su cuerpo no esta Lucas dijo no podemos hacer nada mas vallamos a cas a descansar mañana será un día duro si vallémonos dijo Gabriela espera y si a sido Nuria dijo Lucas que la vio antes ¿Nuria? Si ella esta con ellos en la sala en la que tenían a Elena.
    Al día siguiente pepa nos conto que no tendríamos sociales porque Josemi no había venido ni Nuria ni Elena estaban tampoco dijo que habían llamado alas tres y que no les avían cogido el teléfono por la tarde se reunieron el la cas de Jaime y Lucas avía puesto Nuria un localizador cuando no sabían que era del bando contrario Jaime con su portátil hackeo algunos nuñeros y puso una pantalla en la que un punto verde parpadeaba lo descargo a su Tablet lo siguieron y descubrieron a Nuria con Elena….
    SERGIO SUAREZ

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  37. Nada más encontrarlas Lucas las preguntó:

    -¿Qué os ha pasado?-

    Elena les respondió que al haberla secuestrado, estuvo buscando la salida, la
    cuál no encontró. Nuria, sin embargo, dijo que al ir en busca de Elena, se perdió junto a Elena en la vuelta a casa.

    Cuando fueron a casa de Clara, estuvieron reflexionando sobre lo que les había ocurrido, ya que era totalmente extraño e irreal. De repente Santiago dijo:

    -Más que algo irreal, parece una pesadilla.-

    Cuando las madres de los niños llegaron a casa de Clara, estos fueron corriendo hacia ellas y les dieron un gran abrazo. Las madres, confusas les preguntaron que les ocurría, que parecía como si algo malo les hubiese pasado.

    -Nada, sólo es un abrazo- se apresuró a responder Ángel.
    -Si, no es nada en especial- respondió Alex.

    Lucía propuso, antes de irse cada uno a su casa, decidieron quedar al día siguiente en el parque, para pensar detenidamente lo que les había ocurrido y a todos les pareció buena idea.

    Al día siguiente en el parque, al hablar de aquella experiencia se dieron cuenta de que algo no encajaba y de todas las preguntas que se hacían como:¿Por qué un director tenia que ser malo?¿Porque motivo quería matarles a ellos y no ha otros? y la ultima y mas importante ¿Cómo es que nadie se dio cuenta de lo que les estaba pasando, si era evidente? En fin todo y cada una de estas preguntas era casi imposible de contestarlas, pensó Gabriella. De todas formas lo más importante de aquello era que estaban bien y que todo se había solucionado.

    -¿Qué habrá sido del cuerpo de Josemi?-pregunto rápidamente Lucía.

    -¡Quien sabe!- le contestó Clara.


    -Bueno mañana nos vemos en el cole, y así veremos quien será el nuevo director-repuso Ángel.

    -Si, y esperemos que no sea como Josemi-bromeó Alex.

    Esa noche fue difícil para todos, seguían asustados y aterrorizados al fin y al cabo un director que quiere matar a sus alumnos no se ve todos los días, Pero, aun así, intentaron descansar lo más que pudieron, para estar llenos de energía en el colegio y dar una bienvenida calurosa al nuevo profesor.

    Por la mañana se levantaron contentos y alegres, aunque tenían una sensación extraña que los corroía por dentro, pero decidieron hacer como si nada había pasado y que fue todo fue una pesadilla.

    Cuando Santiago estaba de camino al colegio, se dio cuenta que algo le seguía por detrás. Al principio, siguió como si nada, pero cada vez la sensación de que algo lo observaba era más grande. Por lo que decidió darse la vuelta, para ver que era y cuando se giró, se llevó un gran susto, ¡allí estaba Josemi, apuntando con una pistola a Santiago!, ¡no se lo podía creer!

    -P…Pero ¿tu no estabas muerto?-le dijo Santiago.

    -Sorpresa- se limitó a responder Josemi.

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  38. -Sorpresa- se limitó a responder Josemi.

    -Santiago despierta, despierta-

    ¿Qué ocurre?-dijo Santiago.

    -Nada has tenido una pesadilla- respondió su madre.

    Santiago, al enterarse de aquello fue a contarles a sus amigos lo que le había ocurrido. Quedaron en el parque, como hacían habitualmente, Santiago les contó toda la historia, a lo que sus amigos solo contestaron:

    -¡Que pasada de sueño!- respondieron al unisono.

    A Santiago no le pareció una historia de risa, ya que lo había pasado bastante mal, aunque solo por el hecho de que todo hubieses sido una horrible pesadilla, le hizo sonreír a él también.

    SILVIA MARTÍNEZ

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